Encuentro ocasional.

Fue...

Minutos apenas después de las seis de la tarde justo cuando el sol se marcha y las hojas de los arboles nos inundan como cientos de tinieblas y fantasmas,  fue en ese instante, en que todos huían al saber que es hora de marcharse, cuando ya no hay nada más por qué sudar o cansarse y te apareces tú con  tu boca salida de no sé donde acompañada de otros pasos y otras voces,  ibas toda vestida de cielo desde las orejas hasta los dedos, te vi sin palabras por el asombro de encontrarte pues no había esperanza de verte, pensaba tal vez en cualquier sitio menos el parque.  Te vi dudando sabiendo y no sabiendo si  en realidad eras quien creía que eras…y ya cuando más cerca te vi directo a los ojos sin que tú te dieras cuenta, noté que en realidad eras ella, la mujer sin nombre. Tú y yo en el parque sin imaginarlo apenas, me hice mármol al no saber si seguir tu huella o quedarme, ¡No pude evitarlo! Estamos tan distantes a pesar de estar pisando el mismo pasto y te vi tantas veces de reojo cuando no me viste, te grité tantas veces cuando no me oíste...Después noté que tú también me veías sumergida entre la gente y la tarde, pero llegó la hora maldita y me desvanecí entre las oscuras sombras de los arboles.

             Sin nadie...

Gustavo

Cuestión de fe

…tenía el tiempo justo y necesario para llegar  “a tiempo” al trabajo, salí de mi casa olvidando como siempre algo, ¡mis anteojos! Y justo al límite de, entre la calle y mi casa apareció mi abuela con sus dos trenzas adornadas con una agujeta en rojo y su cabello de color grisáceo, (en verdad que admiro a mi abuela, toda la vida siendo una analfabeta, sabe todo, pero las letras “namas no le entran”).

El asunto de toda esta intro un poco desvariada es que me di cuenta que me empiezan a nacer unas ganas de escribir de mañana, pero, que tiene que ver mi abuela y su relación tan divorciada de las letras? Y lo que tiene que ver es precisamente  “cuestión de fe”. Ella es fiel creyente de los mandamientos “divinos”  y religiosos, ayuda al prójimo  sin trabajo ni oficio de planta, aprendió de memoria liturgias plegarias y oraciones, algunos santitos ocupan un lugar especial en su habitación, lugar que no ocupan fotografías de la familia o de buenos amigos, suele ir acompañada de su soledad a visitar a los santitos en su día… hoy curiosamente me enteré de santa Catarina, y a decir verdad poniendo atención en el nombre, me recuerda que así se llama la patrona del pueblo de donde mi ombligo se perdió. Mi abuela se paró frente a mí con una cara de asombro por la prisa mía  y me  dijo –aquí te persigno?, bueno pues aquí-.  Sacó tres monedas de oh rayos no sé donde, (ahora pienso que mi abuela es maga) las llevó primero a mi frente para después recorrer con ellas todo mi cuerpo, y empezó…

“santa Catarina madre de dios

te pido que a mi nieto

no le falte el pensamiento

dale buena salud

que esté tranquilo

que sea bueno en su andar

que se le quite esa enfermedad mala
socórrelo en la escuela

que tenga buenos amigos

ilumínalo!

Y que no se meta en malos pasos…

¡Amén!"

Todo esto es como un ritual mágico, y yo, apenas escucho la última palabra  abro los ojos y sin importarme las millones de bacterias que contengan, beso  las monedas.. Por “cuestión de fe”, me despido de ella y le pregunto- ¿hoy no hubo flores? (prefiero besar flores a besar monedas, “por cuestión de gusto”) pero antes de que me responda me doy cuenta que la crisis le esta pegando a la abuela.

Total… me fui ahora sí un poco tarde, de “milagro” llegué justo a tiempo para subirme al “cuarteles” (que casi se me escapa).

Y ya a bordo de él me digo a mi mismo, ¡que bonito encontrar asientos vacios y con vista panorámica!, aunque al tener la ventana abierta, el frio  y el viento te  calan los huesos. Comencé a escuchar un ruidito de cómo cuando se raspa una piedra en el piso, pero seguí pensando en la abuela… ¡y otra vez ese maldito ruido!… entonces busqué con la mirada su origen por todos lados, vaya sorpresa era el tipito del asiento de enfrente, y sí,  rayando una de las ventanas del “cuarteles”, sin dudarlo mucho toqué su hombro y él con una cara de espanto volteó a verme, sin dejar que hablara le dije con voz seria -¡deja de hacer eso cabrón, no ves que estoy escribiéndole a la abuela!? Y se detuvo… y es que el sonido no era agradable y la letra era nada bonita, ni siquiera  escribía un “te amo” tal vez eso lo justificaría, las cosas del amor se justifican siempre… pero me sorprendió ser el único sujeto que se ocupara en decirle que dejara de hacerlo, no tanto por “cuestión de creencias” sino porque el ruido interrumpía las oraciones  de mi abuela que volaban una y otra vez en mi cabeza… en el autobús se veían varias gentes puritanas, que ellas sí, por “cuestiones de moral” pudieron haber dicho ¡basta! Pero, será que nadie ve nada?

Y luego llegar a ese “bendito” crucero de la central para poder tomarse una siesta de veinte minutos y al abrir los ojos darte cuenta que hemos avanzado prácticamente, nada. (Maldita sea llevo prisa) y nadie ve nada? tal vez las gafas negras negras del señor agente de transito, le bloquean la visión del agobiante tiempo, que un sólo autobús puede tardarse en “subir animales” (como dice la gente).

Probablemente después de todo sí llegue tarde al trabajo,  pero la próxima vez que mi abuela por “cuestión de fe” llevé las monedas a mi frente, le diré que entre sus plegarias anexe una que diga…

“quítale los ojos a Gustavo

para que también 'no vea nada',

haz que parezca puritano

o que alguien le obsequie unas gafas

como las del señor, agente de transito”…

¡Amén!

G.i.M.g.

tres de mi vida

Re-leyendo las entradas a ésta página, & visualizando los textos que un buen amigo se dignó a subir, me doy cuenta que me gustan muhco los números tres (3 TRES, chon, three, trois, Drei...).

Tres de la tarde, de la mañana, de la tarde.mañana (que jamás entenderé que significa). Justo la hora en que a nadie le gusta estar afuera & menos caminando en unas calles que no regalan ni un centímetro de sombra. Justo la hora en que sales de trabajar & dedicas un tranquilo "hola, como te va/estás", justo la hora en que me dan ganas de comparar blusas & pulseras & globos & chicharrines &...justo la hora en que mi mente se ve atiborrada de palabras.

Ejemplo:

(tres pm sentada en el zócalo de la ciudad de Oaxaca, después de una cerveza León, un té de limón con miel, cigarros frustados & una rebanada de pastel):

Ahora un ave me coquetea.

Se acerca de a poco meneando su inestable cabeza.

Su "cu cu rrú" se oye un poco más cerca de mi nuca.

No volteo del todo.

Intenta convencerme de volar con ella.

Me regala piropos que al mejor conquistador no se le ocurrirían jamás.

Intenta persuadirme inventándose un trabajo digno & un nido perfecto.

También hace bromas sobre sus inexistentes brazos, los cuales desearía para abrazarme al menos.

Llega a picotearme la mano suavemente.

Casi me convence.

Sus colores entre gris, más blanco, más telarañas embarradas.

Alguién lanzó migas de pan a un grupo de palomas al otro extremo de la plaza. El ave las vió; salió volando.

Solo me dejó una cagada en el hombro.

& bueno, así se suceden largos días molestos entre tos & anginas & malestares en el vientre & bares vacíos & gente que sale huyendo de los planes & gente que se va dándote la espalda & gente que no sabe cómo llegar a algún lado & gente que tiene hijos & gente que entra a bibliotecas a buscar información sobre cierto tipo que cree conocer & gente que conoce gente en bibliotecas & gente que extravía comas una calle antes de quién sabe donde...

Jessica.

Juguetito viejo.

Soy como una insignificante marioneta

con un bicicleta minúscula y triste

que después de dar muestra de sus movimientos

se ha salido de escena por amores fallidos.

Sin temor de reclamo y de aplausos

me arrastro junto con los juguetes viejos

al descanso y al olvido

y en el baúl que guarda las cartas

de un poeta que murió en el invierno

me he tomado un receso necesario y urgido.

Con todo el dolor de las lágrimas

y las letras de nadie

sufro viendo como la polilla mata

a mi corazón de palo.

Estoy inmóvil al borde del suicidio

sin más ni menos letras, sin más ni menos hilos

sin más ni menos madera, sin más ni menos bríos.

La araña que guardaba mis secretos

se mudó de mi bolsillo

vive ahora en la cajetilla de cigarros

que enciendo, cuando te recuerdo

cuando te odio y cuando te olvido.

                                            G.i.M.g

No me ames.

Tus ojos me quieren mirar
pero no sé si debo mirarlos

tú dime ¿qué hago?

he perdido la mitad de mí

por hacer a otros caso

estoy medio tuerto, con miedo

sin embargo busco la luz y no la encuentro.

Tus labios quieren besarme

pero no sé si debo besarlos

tú dime ¿qué hago?

me cosieron la boca

con palabras piadosas

ya no digo ni hola

y si hablo es por mi pluma y mi hoja

sin embargo grito a la aurora

y clamo el destello de unos labios.

Tu corazón quiere amarme

pero no sé si debo amarlo

tú dime ¿qué hago?

quién querrá este corazón

que se esconde tras los pulmones

y me llora todas las noches

se me quedó un pedazo en el pasado.

Yo no sé si puedo amarte

yo no sé si me queda un algo…

No me preguntes, no me respondas

no me intentes, no me hables

no me calles, no me quieras

pero sobre todas las cosas

no me ames.

                                                                                                                                  G.i.M.g.



Estoy mirando

Pensando en todo menos en ti
se interrumpe mi “no pensamiento tuyo”

por un pedazo de papel

y estoy ahora mirando las huellas de los pasos

el dolor de la cabeza la inseguridad del alma

el "te amo" el "te olvido", tus aretes, mis anteojos

estoy mirando a la luna ya sin reflejo

la silla del parque ya sin nadie

estoy mirando en mi cabeza el furor de dos amantes

los besos, las caricias, la lluvia golpeando la ventana

ella y él haciéndose uno en la nada

olor de pasiones te huelo, olor de hastío te detesto

estoy sintiendo esos labios temblar con los míos

tus manos en mi espalda, mi amor, mi suspiro

mi muerte ,mi vida, mi querencia ya perdida

estoy mirando con los ojos ya cerrados

hinchados, padecidos de nostalgias y de olvidos

buscando explicaciones encontrando… inútiles razones

estoy mirando las huellas del pasado

el beso de febrero, el amor de marzo

la tragedia de abril y el desencanto de mayo

el frio vuelve, vuelve como antaño

estoy mirando tu nombre en un papel

tirado en el suelo, enroscado, pisado

¡estoy mirando!

te miro, nos miramos.

G.i.M.g

Ñaque

Afortunadamente no padezco de insomnio. Sin embargo, ésta noche mi madre se sentó a tomar café & decidí acopañarla mientras le contaba del profesor de Epistemilogía. Gravísimo error. Son casi las tres treinta & tres de la mañana, & no consigo cerrar los ojos. No es tan malo después de todo; leí un libro completo, dibujé a David molesto y leí también del diccionario de sinónimos toda la letra "O", luego de enterarme de varias palabras con "Ñ":

- Obsecación, manía, obstinación.
- Óbice, obstáculo, incoveniente, dificultad, estorbo.
- Óbito, muerte fallecimiento defuncion.
- Opíparamente, abundantemente, espléndidamente.
- Otomana (ja), sofá, diván, cama turca (quiero una otomana)

Una ñacanina es una serpiente, & ésta me encantó:

- Ñaque: cachivada, fárrago, broza, zupia, ripio, maula.
Ahora debería buscar el diccionario rojo Larousse.

A las dos de la mañana, mis nervios fueron asaltados por un viejo recuerdo. Mi padre tuvo otra mujer hace años, de eso mi hermano & yo estuvimos seguros, pero nunca tuvimos pistas, nunca se lo dijimos a mi madre. & ésta noche caminé segura de hallar algo en su baúl.

Nada.

Como una parte de mi corazón estaba esperando, no hallé nada (ahora más despierta me pregunto que hubiera deseado encontrar). Solo cassettes viejos, cajas vacías & otros sin rótulo. Uno de ellos decía solamente "JL".
Lo tomé & regresé al cuarto entre la oscuridad de mi "sin sueño", no sin antes pisarle la cola al perro & romper un vidrio afuera de la cocina.

"Quiero decir que estoy harto de mí.

Si algo de ti permanece aquí,

sácalo, sácalo,

antes que me lleve el diablo,

sácalo, sácalo,

antes que nos lleve el diablo..."

Era Jaime López. Unas colaboraciones de Cecilia Toussaint & un trozo de silencio.Descrubrí un cofre del tesoro, traficaré con copias de esos cassettes, ganaré mucho dinero (sin duda habrán más desquisiados viejos rockanroleros que valoren tanto como G. estas reliquias)...& pagaré un detective que investigue las andanzas de mi padre.

Afortunadamente no padezco insomnio. Sin embargo, ésta noche mi madre se sentó a tomar café & decidí acopañarla mientras le contaba de un baúl que guarda secretos & fotografías viejas, cartas sin destinatarios & camisas con olor a mujer.
 

"busco apaciguar cierta inquietud..."



&necesitaba contarle a alguien.

historia caminera, parte I

"...Que le traigan sus muñecas,

que le traigan un bidé,

y la caja de botones

de que ha hecho colección, para coser.

Jaime M. Villarreal,
de Luis Argudín

¡La niña tanto le ha gustado al Coronel!..."

 
Me he robado unos versos de cierta canción.
Se llama...(¡ta ra ra rá!)...BOTONES, &es obra del señor Jaime Moreno Villrreal.
 
Hace un par de dias me preguntaban por qué el nombre del blog, por qué en inglés, por que no me alimento, por qué en vez de comer compro aretes o cuadernos, por qué no doy primero el paso derecho...en fin, interrogantes que poco a poco iré-mos resolviendo. Pero la del blog, no estaba muy segura de saberla ni yo. Fue momentáneo acaso, quizá un delirio; ví caer un botón &me imaginé la frase, algo debió pasar pues.
 
Mientras tanto, bueno no, ya tiene ratito que no se grabó esta canción. Es decir, fue grabada por Radio Educación, pero jamás editado en disco alguno.
La canción apareció un jueves en mi vida, como tres treinta de la tarde. Regresaba yo en el automóvil destartalado de un amigo ya grande, como de treinta &tantos (tengo 19, cabe aclarar) & me presumió:
-que quieres escuchar?
& le miré aburrida
-pongamos algo que comience con la letra...J
-No me gusta la J
-a mi tampoco, pero me gusta el nombre Jaime...
 
Mi amigo ya mayor, es un tipo que nació hace tantíiiiisimos años, que no sale de la casa de sus padres & que da clases de historia en cierta primaria de la ciudad. ¡Ah! pero carga su ipod, &es de las contadísimas personas que, cargan buena musica en él. Me gusta que pase por mi a la escuela, solamente porque el regreso, ese largo camino amarillo de mas de una hora, lo hacemos en compañía de "rock mexicano de calidad", segun sus palabras.
 
-Jaime Moreno Villarreal...va botones...
-letrista mexicano. Buenísimo. No ha grabado nada en estudio. Ésta es una cierta narración postrevolucionaria. O post lo que quieras, a estas alturas ya no sé de qué comen los adolescentes.
 
& comienza la instrucción.
Una niña que es raptada de su hogar para llevarla con un tal coronel.
& me viene a la memoria: el blog. Los botones & su camisa de mezclilla (¿habrá tal cosa?). Sus botas que suenan con piedrecillas &sus ganas de contarme todo lo que sabe, de preguntarme todo lo que se supone yo sé.
 
 

Lo que falta. Todo lo que falta.

someone there?...

 

"Well, if i had to do it all over again,

babe, i'd do it all over you.

and if i had to wait for ten thousand years,

babe, i'd even do that too.

well, a dog's got his bone in the alley,

a cat, she's got nine lives,

a millionaire's got a million dollars,

king saud's got four hundred wives.

well, ev'rybody's got somethin'

that they're lookin' forward to.

i'm lookin' forward to when i can do it all again

and babe, i'll do it all over you..."

BOB DYLAN.



que si era, que no era, que no!¡

Comenzó a las siete. Llegué como veinte minutos antes para hacer unas fotografías. Estaban Edgar & Rubén: mientras uno encendía las veladoras en el altar, el otro afinaba la guitarra & daba unos sorbos a la copita que les pasaron. Hacía frío.

El viernes desde la escuela a las siete de la mañana, unos amigos después de clases & luego el maldito camino de regreso, ese largo largo & amarillo. Lleno de sol, de calor & cansancio. Una abeja me picó, otra se atoró en mi cabello, otra me siguió hasta la casa.

Regresé al centro & la biblioteca amarilla comenzaba su actividad. Por Porfirio Díaz avanzaba un tránsito demasiado ruidoso, con sueño ya, lleno de claxons. Un amigo me invitó su vucio, pero no comí, & eso me hacía daño al estómago, así que resistí. Pasó un señor que cantaba a cafetacvba, nos reímos CON el, & mi amigo se fue a trabajar luego (repartidor nocturno de una taquería de la col. Reforma).

Entré. Cantaron. Rezaron. Presentaron hablaron reímos lloramos aplaudimos & terminamos. Luego la exposoción del material gráfico & visual.

A la mitad de la noche confundí a JP con un chino que andaba de pasillo en pasillo. Me observaba & quería hablar. Estaba casi segura que era el. Pues vamos, lo vi solamente una vez hace que? tres meses, mas? menos? Sinceramente JP apenas & recordaba tu cabello, tu voz & ese: "vale, un abrazo"...

En la sala de la exposición tomaba fotorgafías & leía unos letreritos cuando, se apareció este curioso francés (se llena de franceses mi agendita), con una mochila pesada a la espalda. Se interpuso entre mi "cohete" & mi lente, así que lo tomé a él, ya qué amigo estás ahi parado & pues...click¡! El francés me invitó un café, luego una cerveza, luego a su presentacién del domingo (toca el acordeón), luego me pidió mi número, luego no dejaba de sonreírme; luego me pidió matrimonio, luego me besó...Ja, no, pero hubiera sido algo graciosísimo. No pudimos platicar mucho porque, bueno, mi mal francés & su malísimo español, solo dejaron que preguntara mi nombre (él Julian) & lo del café...Quedamos en vernos el domingo en Ciudad Universitaria, nos despedimos & se fué. Julian se llevó un silvido, una foto, mi numero celular & las ganas de tomar un café...

Aun así, no me animaba a acercarme. El supuesto JP estaba a solo cinco o cuatro pasos. Alejandro se apareció & platicamos un poco sobre su trabajo, sobre su vida, & sobre Gustavo. El chino en cuestión, el que no era JP, estaba entrevistando a ciertos artistas; yo lo miraba & trataba de descubrir su nombre o de donde lo ví alguna vez o simplemente si tenía la sonrisa confiable como para decirle lo de la confusión & hacerlo reír otro poco.

Salió & salí tras él. No a propósito claro. Ellos (todos) se fueron a cierta librería unas calles mas arriba. Yo aún no decidía, pero un café era primero, asi que subí otra calle. El chino estaba platicando con los músicos & al mirarme hizo gesto de querer hablar, lo saludé, pero supongo que con gesto de querer huir. Bueno pues huí. Fui por mi café & él se quedó parado ahi.

Ahora sé que no era JP. Pero sigo pensando que lo conozco; que de algún tugurio nos habremos conocido.

 "todo depende de lo que pase ésta noche"

JuanPablo